Densificar empieza a ser un lugar común. El consenso acerca de la mayor eficacia de una ciudad densa y concentrada en comparación con una dispersa pasó de las aulas a la calle y, hoy en día, hasta los desarrolladores y los delegados comulgan con este axioma, tratando de cargarlo con sus propios intereses. DenCity —o Densi[u]dad— no sólo supone un cambio de escala, sino un nuevo paradigma que impacta en las costumbres, en la relación entre el ciudadano y la ciudad. Ciertamente, una ciudad más densa es más eficiente, más compacta, pero también está más congestionada. La densidad es una medida fundamental de la estructura urbana para determinar la eficiencia de la mancha urbana y sus límites. Las altas densidades facilitan un transporte público más sustentable y eficaz, la compacidad permite caminar o circular en bicicleta, y se justifica la concentración de servicios, con lo que se promueve una mayor vitalidad; sin embargo, estas ventajas dependen de un diseño urbano de alta calidad y de una gestión efectiva de la ciudad para minimizar el impacto negativo de la congestión, la sobrepoblación, el estrés y la contaminación.
Alejandro Hernández apunta que la densidad no vale por sí misma si no se conecta —literalmente, mediante la infraestructura y la calle— con la intensidad urbana. Para él no se trata tanto de la ciudad densificada, sino intensificada. De Metrópolis, de Fritz Lang, a Lost in translation, de Sofia Coppola, pasando por Delirious New York, de Rem Koolhaas, se ilustra cierta cultura de la congestión donde se solapan multiplicidad de usos atrapados en las construcciones en altura. Sin embargo, la densidad —añade Saskia Sassen— entendida sólo como la construcción de edificios en altura, no es equivalente a la urbanidad. Tras la expansión descontrolada de ciertas zonas metropolitanas, se propone la densificación como una solución para dar forma a ciudades más eficientes, económica y ecológicamente sustentables. Cabe entonces preguntarse por las relaciones entre congestión, densidad y urbanidad, cómo se implican una a la otra y en qué condiciones.
Desde este número 71 de Arquine, que acompaña el 2º Festival de Arquitectura y Ciudad MEXTRÓPOLI, se ilustran nuevos edificios, que cambian la escala de las metrópolis contemporáneas, y centros de transferencia modal [cetram], que detonan nuevas centralidades dentro de la estructura policéntrica de urbes como la capital mexicana, lo cual redunda en la morfología prehispánica y en la autonomía de las delegaciones. Asimismo, varios ensayos ahondan en la discusión sobre este fenómeno contemporáneo.
Obras
Dominique Perrault Architecture | OMA | IND [Inter.National.Design] | Urbanus | TAX | Migdal Arquitectos: Jaime Varon + Abraham Metta + Alex Metta | Gaeta Springall Arquitectos: Julio Gaeta + Luby Springall | Sordo Madaleno Arquitectos | arquitectura 911sc: Saidee Springall + José Manuel Castillo | Teodoro González de León | LBR&Arquitectos | Legorreta + Legorreta y Rogers, Stirk Harbour + Partners
Ensayos y conversaciones
Alexander Apóstol | Lance Wyman | Alejandro Haiek | Cristian del Castillo | Jimena Hogrebe Rodríguez | Rebecca Rojas | Emilio Canek Fernández | Andrea Griborio | Daniela Bojórquez Vértiz | Pedro Hernández Martínez | Mariana Barrón | Mateo Fernández-Muro | Juan José Kochen | Félix Sánchez | Rosalba González Loyde | Ernesto Betancourt | Gustavo Gómez Peltier | Roberto Remes Tello de Meneses | Francisco Pardo | Pablo López Luz