El río Francolí, al sur de Cataluña, creció descontroladamente durante el temporal de finales de octubre de 2019, destrozando el puente medieval de Montblanc y sus alrededores.
Enginyeria Reventós se encargó del proyecto de rehabilitación del puente del siglo XII, usando técnicas temporalmente mixtas, modernas en los cimientos de concreto, reparación de fisuras, aserrado de piedras, tradicionales en los morteros, troceado y picado de piedras, en las que se implementaron técnicas de construcción del medievo.
Parte de la adecuación del entorno del Pont Vell propone nuevas circulaciones a través de superficies diversas enlazando niveles, terrazas, patios públicos, y también incluye una pecera, una pequeña presa, para que siempre haya una lámina de agua permanente entre el puente viejo y el nuevo, sin tratar de mimetizar la arquitectura preexistente en las nuevas actuaciones.
Finalmente, el proyecto también tenía como objetivo ordenar la fachada fluvial norte de la villa, articulada desde tiempos inmemoriales por el camino real y el Pont Vell, el barrio del Raval de Santa Anna, centrado antiguamente en los oficios del agua, con el recinto amurallado como telón de fondo, uno de los mejor conservados de la península ibérica.
La propuesta lumínica, de La Invisible Studio, tenía como objetivo iluminar el puente resaltando la estructura medieval y en los espacios públicos del entorno ofrecer iluminación funcional jugando con diferentes niveles de iluminación, más altos en los espacios de circulación y más bajos en los espacios de contemplación, donde los vecinos y visitantes suelen quedarse.