El campus de la EBC Aguascalientes se ubica en la zona nororiente de la ciudad, a las afueras de la mancha urbana, en un área dominada por el uso residencial, pero que cuenta con una robusta infraestructura educativa.
El proyecto consistió en el desarrollo de un edificio para educación superior dentro de un terreno de 19,899 metros cuadrados aproximadamente, que considerando el uso de suelo, se limitó un desplante máximo de 9,500 metros cuadrados. La fuerza de las instituciones radica en sus valores, así como, en su capacidad de transformar al individuo, el cual transforma el entorno y enriquece con su experiencia a la sociedad en conjunto. Es así, que la arquitectura educativa debe fungir como una plataforma que promueva el acto de educar y aprender.
A fin de cuentas, lo ideal es proponer espacios que propicien el intercambio intelectual entre sus usuarios. Este proyecto aborda la temática del campus universitario a través de la experiencia vivencial del estudiante. El concepto central sostiene la idea, de que, el espacio más importante del campus es aquel brindado a la convivencia e interacción natural de los usuarios, aquel espacio fuera del salón de clases, donde suceden los encuentros y se borda el tejido social. Dicho espacio, es el espacio de encuentro, entendido como el vacío resultante del acomodo más lógico, practico, funcional y flexible de las partes tradicionales que conforman el campus.
Compuesto por un edificio en dos niveles, atravesado por vacíos horizontales y verticales que generan una espacialidad y vivencia interior. El juego de llenos y vacíos arroja dos grandes patios centrales, una plaza pública y un jardín contemplativo, espacios que están conectados y que se entienden como uno solo. La calle, expone al individuo y sus pensamientos, promueve el intercambio, orienta al estudiante, desaparecen las jerarquías y se libera el pensamiento. Los accesos al campus se han diseñado para tener únicamente dos puntos de control, desde la avenida principal o desde los estacionamientos.
Los salones de clases se encuentran cercanos a los dos accesos del campus, donde se han ubicado dos núcleos de circulación vertical. Cada salón se relaciona con un jardín interior, el cual potencia la concentración y el estudio, estos se conectan con un pasillo exterior que organiza la circulación de manera simple y eficiente. Como cerramiento de los salones, se ha diseñado una piel en base a módulos prefabricados, con el objetivo de optimizar su montaje y obtener ventajas técnicas de funcionamiento.
Esta piel garantiza la concentración al interior de los salones incluso cuando se utilizan los pasillos exteriores. El salón de usos múltiples y el auditorio colindan con el acceso, esto permite realizar actividades de la comunidad educativa de manera expedita y sin interrumpir el funcionamiento normal del campus. Además, estos dos espacios se encuentran vinculados con la plaza techada, lo cual permite realizar múltiples eventos de diferentes características.
El centro de aprendizaje es el corazón del campus y se ubica entre la plaza pública y el jardín interior. Esto refleja su doble condición de lugar de encuentro entre los alumnos y al mismo tiempo de lugar de trabajo y concentración.