Conflicts of an Urban Age(1) se titula una muestra curada por la London School of Economics en conjunto con Arup. Recoge varios de los estudios elaborados por la misma LSE bajo la dirección de Ricky Burdett y los confronta con propuestas emergentes en seis ciudades, una de ellas la Ciudad de México. Los dos proyectos mostrados –el bosque vertical en el periférico sur y el parque la quebradora en Iztapalapa— aparecen como pequeñas minucias en una ciudad donde cada cambio minúsculo tiene más efecto que un proyecto de escala metropolitana.

Una posible disolución —o por lo menos relajación— de los bordes políticos/administrativos podría abrir la oportunidad a una movilidad urbana regional del valle de México, consolidada en sus políticas, regulaciones e iniciativas. La infraestructura de SACMEX (Sistema de Aguas de la Ciudad de México) podría tener una visión hídrica de cuenca para todo el valle de México, ser más resiliente y atender –con incentivos— el re-uso de agua para reducir la demanda. Solo dos temas que la futura Jefe de Gobierno debería tener en mente. Lo opuesto seria mirar desde abajo —desde la sociedad civil. ¿Qué temas surgen, qué soluciones se proponen desde un sentido común, ingenuo, persistente y con coraje? Este es el punto central de la muestra de LSE y Arup.

Por todo lo visto hasta ayer por parte de los candidatos y la ganadora, Claudia Sheinbaum, la propuesta de gobierno en materia de planeación urbana se asemeja más a una nueva ola de modernidad liquida –como la define Zygmunt Bauman— en donde las propuestas se irán sacando del sombrero, alineando intereses privados con tintes de beneficio público. Un par de muestras recientes de esta fluida transformación de opinión tiene que ver con el cuestionamiento sobre la planta de termo valorización que el actual gobierno de la Ciudad de México anunció hace solo meses y ahora, al parecer será revisada.(2) El otro ejemplo tiene que ver con el parque público más grande que se haya creado en la Ciudad de México en los últimos 20 años y que sea producto de una concesión a un privado para capitalizar ellos mismos en la captura de valor de la tierra.(3)

Ambas actitudes, demuestran la mentalidad propuesta por Bauman como una ´normativa mental´ enfática en el cambio continuo y el evitar la permanencia –en la búsqueda de lo transitorio por encima de lo que se da por hecho o de firme compromiso. En este momento de cambio que comienza, la Ciudad de México requiere de acuerdos estratégicos entre el sector público y privado para proyectos estratégicos como el lograr un equilibrio metropolitano en materia de infraestructura hídrica entre el poniente y el oriente de la ciudad o generar espacio público-verde de calidad.

En la muestra de Burdett y Arup, uno representa al establishment de la ciudad como laboratorio y el otro, representa a una de las firmas más reconocidas en materia de urbanismo e infraestructura propone repensar la ciudad a través de iniciativas de los protagonistas —los ciudadanos— y no de las instituciones. Esto Puede crear una nueva forma de solidaridad social como lo propone Ulrich Beck. Quizá aprovechando el momento en que llega Sheinbaum a la jefatura de gobierno, sea tiempo para consolidar esto. ¿Se va a dar finalmente el cambio de escala en temas de planeación urbana, movilidad y gestión ambiental? ¿O se seguirá con la mezquindad local en donde incluso, ante un evento devastador como fue el terremoto, el presupuesto para la reconstrucción, se “pelea” entre delegaciones sin mostrar resultados? La exhibición busca mostrar que, cada vez más, la ciudad será transformada por ideas desde abajo.

https://www.youtube.com/watch?v=pcTFWMLNp2I

(1) arup.com
(2) cronica.com.mx
(3) altonivel.com.mx