10 agosto, 2012
por Arquine
por Maui Cittadini / @mauicittadini
La textura de un edificio es el tapiz, revestimiento e identidad de la ciudad y su silueta urbana. Textura(s) reflejantes y reflejadas que se vuelven envolventes e iconografías, planteamientos sobre delimitaciones, bordes y objetos de referencia que no sólo afectan a la arquitectura, sino a la percepción y legibilidad de las ciudades. La textura es el elemento visual -no sólo como postal turística- que arma entramados y planos configurados por volúmenes superpuestos de materiales, alturas, escaleras, balcones, ventanas encontradas. Ante la textura de una ciudad, las cualidades estéticas, ritmos y encuadres se unifican como parte de un mismo valor comparable y uniforme, una misma composición de escalas cromáticas y superficies que trascienden la razón de su verticalidad para formar una secuencia horizontal.