Terreno y superficie óptima
Inmerso en una zona boscosa llena de árboles y vegetación frondosa, el terreno cuenta con un gran desnivel que puede ser aprovechado para generar vistas a su alrededor. Se busca una superficie en la que no se elimine ningún árbol, sacando el mayor partido al contexto inmediato y de todo el entorno natural del terreno.
Asoleamiento y volumen
Debido a la disposición de los arboles, existía un punto en el cual el asoleamiento era demasiado potente en el área publica del proyecto, por lo que se plantea seccionar el volumen. Así, la casa se divide en dos volúmenes principales, uno de uso privado y otro público, garantizando la mejor iluminación en cada espacio sin sacrificar la comodidad de los habitantes. Entre ambos volúmenes resultantes, se generan áreas de convivencia para aprovechar mucho mejor el terreno al distribuir espacios a lo largo de él.
Losas
En el volumen público se eleva la losa para alcanzar mayores las vistas hacia el fondo del terreno, aprovechando su misma inclinación. En el volumen privado se genera una terraza en la azotea que utiliza el área más elevada del terreno y las vistas que se encuentran alrededor, tanto de día como durante las noches estrelladas.
La construcción se distribuye a lo largo del terreno para aprovecharlo al máximo y, al mismo tiempo, dejar áreas abiertas naturales y zonas para el desarrollo de futuros crecimientos, dentro de los cuales se tiene planeado un anexo para piscina, una casa de huéspedes con áreas divisibles y paneles móviles –para poder albergar hasta a 15 personas simultáneamente–, casas en los arboles para los niños, una sala de cine interior y otra al aire libre, junto con un pequeño paraninfo, ya que la mayor parte de la familia toca instrumentos musicales y, cuando tiene visitas, hacen pequeñas presentaciones personales y en grupo para éstas.