El diseño de la reconstrucción y ampliación del Pabellón Z se basa en la forma original del edificio que constaba de tres bloques crecientes. El estudio A8000, sin embargo, se basa en él a la perfección. La inspiración para la reconstrucción fue el proceso de cría de bonsáis. Del mismo modo que se corta una parte cuidadosamente seleccionada de las hojas de la planta para conseguir un nuevo aspecto aireado y original, los arquitectos eliminaron los depósitos individuales de época y las capas aleatorias que no favorecían el aspecto del edificio. Se eliminan partes de la masa original – acristalada para dar al efecto final un aspecto aireado y elegante. El pabellón original se ha desnudado hasta los huesos, en un esqueleto de acero expuesto.

La multifuncionalidad era también un tema central del proyecto, que se convirtió en esencial para el renacimiento del Centro de Exposiciones del Pabellón Z de České Budějovice. La idea básica y el encargo del inversor era crear un espacio multifuncional y lo más variable posible, no un pabellón de uso único. El pabellón debía servir para diversos actos; como ferias, exposiciones, congresos, pero también bailes y conciertos. Puede adaptarse a los distintos retos y requisitos técnicos de los organizadores. No sólo el aspecto arquitectónico, sino también el técnico del proyecto eran absolutamente cruciales. El pabellón principal está diseñado como un espacio abierto multifuncional y muy variable, que puede cambiar su disposición libremente de sala de exposiciones a sala de congresos o teatro, a salón de baile o sala de conciertos. El pabellón renovado ofrece ahora una sala principal con capacidad para 850 asientos o 1500 personas de pie. La multifuncionalidad está inscrita en todas las partes del proyecto, por ejemplo, con el uso de suelos minimalistas de concreto pulido, habituales en centros logísticos y naves de producción. Acogerá tractores durante la exposición agrícola, pero no ofenderá ni siquiera durante un acto social festivo o un concierto de la Orquesta Filarmónica de Bohemia del Sur. Además, el vestíbulo de entrada y el espacio principal fluyen libremente hacia la planta superior, donde encontramos dos salas adicionales que pueden dividirse de forma variable y utilizarse como instalaciones para eventos, espacios de exposición o salas de conferencias.

El pabellón se abre especialmente en su parte oriental hacia el río y la ciudad. Materialmente, el aspecto exterior adopta dos formas: sólido y transparente. Para la forma maciza, el material elegido son casetones metálicos blancos y láminas de cubierta blancas. La forma transparente se aborda con vidrio, ya sea acristalamiento estructural transparente o el material más íntimo de la copilita. El uso de vidrio perfilado es también una referencia a la arquitectura original. Se complementa con ventanas de gran formato que abren el espacio interior con una solución contemporánea.

El interior está diseñado para ser abierto y flexible. Para crear el máximo espacio posible, todas las instalaciones auxiliares se concentraron en el ala más exterior, dejando libre el resto del edificio. De este modo, el pabellón puede modificarse mediante un sistema de cortinas que van desde el espacio de exposiciones o galerías hasta la sala de conciertos cerrada. Cuando las cortinas están abiertas, la vegetación circundante fluye directamente hacia el interior de la sala, mientras que cuando están cerradas, se crea una perfecta caja negra. Uno se encuentra dentro y en el verde al mismo tiempo. Un elemento limitador pero hermoso fue la estructura existente del edificio, donde se conservaron las estructuras de acero a la vista, desenmascarando así aún más todo el espacio y sacando a relucir su estructura original: el alma. Este principio también determinó la dirección del diseño del interior, donde, en contraste con el exterior casi minimalista, se adoptó un enfoque más tecnicista al borde de la arquitectura de alta tecnología. Así, diversos sistemas de equipamiento técnico, desde los enormes conductos de climatización hasta las tuberías rojas del sistema contra incendios, nos acompañan por el interior. La atmósfera del interior queda suavizada por la suave luz que penetra a través de la pared de copilita, que también muestra los contornos de los acontecimientos del exterior.