Presentado por:

Nombre del Proyecto: Pabellón 1800 | Taller Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo
Arquitectos: Taller Mauricio Rocha + Gabriela Carrillo
Página web: www.tallerdearquitectura.com.mx
Ubicación: Ciudad de México, México
Fecha: 2019
Fotografía: Jaime Navarro

La idea del pabellón empezó por entender lo que representa una marca que produce tequila y pensar en todos los procesos de manufactura artesanal que ese producto implica.

Nos interesó la idea de observar el campo y entender esos procesos: cómo se saca el agave, se jima, se desnuda de algún modo y aparece la piña, que es un objeto de una gran belleza estética.

Quedan las pencas, que se reciclan y se usan de diversas maneras, por su fibra, para composta, y también para cubrir algunas construcciones locales.

En nuestro trabajo siempre hay un interés por entender cómo se relaciona el esqueleto con la piel, que se integra no sólo como una cubierta.

Es una manera de pensar cómo se construye el espacio y también su experiencia.

También buscamos entender las cualidades particulares de cada material que usamos.

En este caso, se trata de una fibra natural, una planta que no sabíamos exactamente cómo iba a reaccionar.

Nos dijeron que con la humedad y el sol las pencas empezarían a descomponerse, habría un olor particular y ese olor atraería insectos.

Eso al final también sería parte del espacio que propusimos. Por otro lado estaba la condición efímera.

Tomamos en cuenta el lugar donde se iba a instalar, en una esquina de la Alameda y la escala. Quisimos hacer un espacio que sirviera como refugio, como resguardo ante esa escala de la Alameda.

La forma del pabellón no sólo responde a la estructura básica y a la manera de ordenar las pencas, sino que se relaciona con la fuente circular que está a un lado de donde se instaló.

También es una referencia a las ruinas circulares, a los guachimontones en Jalisco.

Y pensamos en una forma simple, que con su propia lógica estructural pudiera construirse en el poco tiempo que se tiene para tener listo el pabellón y luego resistir bien los días en que es visitado por miles de personas.