La construcción de un Centro de Transferencia Modal (Cetram) es quizá uno de los proyectos más complejos que se han desarrollado en los últimos años en la ciudad. Su principal objetivo es concentrar y reorganizar los diferentes sistemas de transporte de la ciudad en un solo lugar. Con base en las estrategias de distribución y control de flujos y circulaciones, se busca mejorar la calidad de vida de quienes se trasladan de un lugar a otro de la ciudad.
El cetram de El Rosario se compone de cinco andenes para camiones y transporte concesionado en la planta baja, que conectan con la estación terminal del metro. Una serie de circulaciones verticales y amplios corredores de gran altura permiten mantener una constante relación visual entre los diferentes niveles del edificio.
El cerramiento de la fachada delimita el volumen hacia el exterior y deja filtrar la luz y el aire para optimizar las condiciones de ventilación natural. El edificio funciona como una máquina eficiente de flujos de personas y es el resultado de la materialización de acuerdos entre iniciativa privada y gobierno. Es un espacio que permite agilizar el transbordo de los usuarios y beneficia a la comunidad, ya que contiene una serie de equipamientos comerciales y otros servicios sociales y culturales que la ciudad necesita.