El Parque Bicentenario Ecatepec, también llamado en su momento proyecto Terrazas Filtrantes, interviene en una zona que, históricamente, ha sufrido de la falta de planeación, la informalidad y la carencia de servicios de transporte, seguridad y, tan importante como todo lo mencionado, áreas recreativas.
Así, esta intervención partió de un área total de 20 hectáreas, de las cuales trabajó de manera directa en 8 que se encuentran en la zona de laderas que marca el límite de Ecatepec con la Ciudad de México. A su vez, esta era un área cercada que limitaba el paso de los habitantes, por lo que Taller Capital concibió desde un principio derriba este obstáculo para promover la accesibilidad y llenar el vacío urbano que significaba este parque. Para tal efecto, se atravesaron los ejes de las calles aledañas y se transformó el parque en espacios públicos longitudinales, de conexión, peatonales y ocupados por distintos programas: áreas infantiles, canchas deportivas, instalaciones de parkour, un lienzo charro y un campo de beisbol.
La característica infraestructural más importante del proyecto es su aprovechamiento de las características formales del asentamiento: las laderas se usan como escurrimientos pluviales que detienen la erosión y ayudan en la reactivación de los mantos acuíferos de la zona, la reparación de la vegetación dañada y la prevención de inundaciones mediante un sistema de plataformas rellenas de grava de tezontle que favorecen la infiltración.