Proyecto dentro de la Revista Arquine 107 – Trazas
Además de su forma casi triangular, el aspecto más llamativo de la torre ubicada en Tonalá 15 es la fachada reticulada de concreto aparente, pigmentado en tonos cálidos, que además integra líneas rectas con formas curvas.
En cada uno de sus 11 niveles se ha colocado vegetación que enmarca los ventanales. En la planta baja, el acceso está acondicionado para locales de comercio y como plaza pública, mientras que en el resto de las plantas se han acondicionado 44 departamentos.
En el techo se ha colocado un huerto urbano que busca un vínculo sustentable con sus inquilinos y con el resto de su barrio; además sirve como una terraza que permite ver, sobre todo, el norte de la ciudad desde una intimidad que parece ajena a la intensa actividad de sus alrededores.