STARH, despacho búlgaro, diseñó el Infinity Park, un edificio residencial en una propiedad enclavada entre el bulevar General Danail Nikolaev y el parque Zaimov, en Sofía, en la capital del país. La especificidad de la propiedad y la proximidad al parque son la base del concepto arquitectónico para crear un edificio residencial contemporáneo con un volumen geométrico tan limpio.
El edificio no tiene parte trasera, sino dos caras. Los espacios habitables, situados en la fachada sur, están acristalados en toda su anchura, proporcionando un efecto “infinito” a las vistas del parque y la montaña. Al mismo tiempo, la fachada norte, paralela con el bulevar, es lo más sólida y diáfana posible. La línea ascética de la fachada está enriquecida de manera delicada con paneles compuestos de aluminio a gran escala con forma de píxel en varios tonos de gris, que miden hasta siete metros.
Una fachada de alta tecnología, suspendida y ventilada, de paneles compuestos de aluminio reviste todo el edificio y se asocia con el vidrio, el segundo material de la fachada. De este modo, Infinity Park armoniza con un edificio cercano ya existente, colaborando en su gama y materiales comunes. La elección del aluminio y el vidrio permite lograr un diseño moderno con pureza de formas, gran precisión de ejecución, máxima durabilidad y mínimo mantenimiento a lo largo del tiempo.