El sitio del proyecto se encuentre frente a la remodelación de una estación en la ciudad local de Aichi en Japón. A pesar de estar situado en una zona comercial, el cliente decidió vivir aquí por diversas razones. Por ello, el solar está situado a menos de un minuto a pie de la estación y está rodeado por una nueva carretera ancha y un gran terreno sin construcciones.

Este proyecto propone una casa que conecta a la ciudad y la casa considerando el conflicto entre la escala grande y civil de la ciudad y la escala pequeña de la casa como contexto de esa ciudad, y creando un entorno adecuado para cada una. En concreto, el edificio se sitúa en el mismo borde de la carretera frente a la casa, y la primera planta se reduce gradualmente desde el borde de la carretera. El interior de la casa en el lado de la calle tiene una altura de techo abovedado de más de 6 metros y ventanas que llevan la gran escala de la ciudad al interior de la casa. A partir de ahí, la altura del techo desciende en forma de escalera hacia la parte trasera de la casa, transformándose gradualmente en un pequeño espacio que parece estar envuelto por la ciudad.

Finalmente unas columnas de 1,4 metros de altura conecta con el jardín exterior. Al hacer que el espacio interior de la primera planta con diferentes alturas de techo sea un espacio sin fisuras y sin pilares, la vista elevada que se ve desde la gran ventana del lado de la carretera y la vista del jardín que se ve desde la pequeña ventana baja de la parte trasera están conectadas en el espacio vital. La primera planta con diferentes alturas de techo en forma de escalera permite que la segunda planta adquiera su forma invertida. A la segunda planta se accede desde el espacio de techo bajo de la primera planta y es un espacio oscuro y tranquilo compuesto por habitaciones privadas. Cada dormitorio, el espacio más privado, tiene una gran ventana con vistas a la estación elevada que se encuentra frente a ella a través del hueco de la escalera.

Esta residencia propuso una forma de vivir que conecta las diferentes escalas de la ciudad y la residencia en la zona de re urbanización frente a la estación. Al diseñar espacios perfectamente conectados entre sí, los residentes pueden descubrir una variedad de lugares para vivir, como estar conectados abiertamente con la ciudad o relajarse en su propio espacio cerrado, a través de pequeñas actividades diarias como estar de pie, sentarse o acostarse. Se esperaba crear una forma de vivir y un paisaje que no se mezclara con la ciudad ni se resistiera a ella.