23 marzo, 2013
por Arquine
“Anticuerpos. Obras de Fernando y Humberto Campana 1989 – 2009”, curada por Schwartz-Clauss con museografía de Estudio Groenlandbasel, se exhibe en el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO) a partir de este viernes y hasta el 16 de junio. Se trata de la primera exposición retrospectiva de los brasileños Fernando (1961) y Humberto (1953) Campana, al mostrar los colores, formas, materiales y texturas que utilizan para crear piezas que proyectan las raíces de la cultura brasileña y su influencia surrealista. Organizada por Vitra Design Museum, la muestra reúne mobiliario, trajes, esculturas, objetos cotidianos, instalaciones, fotografías y videos, en cuatro salas del MARCO. En total, 180 piezas, de las cuales una selección fue creada especialmente para la exposición, diseñada en papel maché y collages. A su vez, la muestra sintetiza el método de trabajo de los diseñadores brasileños y sus estrategias artísticas en distintas etapas.
El primer núcleo de la exposición, Objects trouvé, narra cómo los hermanos reinterpretan objetos y materiales cotidianos ajenos a los contextos del diseño, como cuerdas y mangueras de PVC, para utilizarlos en la creación de nuevas obras, como en la Silla Vermelha. En el segundo, Acumulaciones, se exhibe su obra con cartón reciclado en São Paulo; mesas, biombos, sillas, sillones y taburetes como Children Chair y Papel Sofá. En el siguiente, Collages, exhibe la evolución de la forma llevada a soluciones orgánicas donde las piezas evocan calamares, pulpos, árboles o corales. En contraparte, las obras del núcleo Superficies dobladas poseen formas nítidas y geométricas. El contexto regional y geográfico de su origen amazónico se muestra con Nudos, al representar el uso de alambres entrelazados para crear objetos como sillas y mesas. Por último, la técnica de fragmentación y reconstrucción es utilizada en sillas, cestos de la basura y esculturas, reunidos en Fragmentos, los cuales funcionan como epílogo discursivo para terminar con los módulos Híbridos y Palos, donde se aprecia el uso híbrido de diseños y materiales como el mimbre y el plástico.
“Nuestra obra nace de la manipulación de los materiales. Las piezas empiezan a tomar forma tan pronto comenzamos a jugar con los materiales; los materiales nos indican hasta qué punto quieren y pueden ser transformados. Nuestros objetos son fruto de esta experiencia lúdica, de la voluntad expresada por los materiales. Trabajamos con las manos para seguir expresando un carácter territorial específico, para dar a nuestros objetos aquella diversidad que deriva de la imperfección y de la falta de homogeneidad que tienen las cosas hechas a mano, ese algo único y preciado que nace de lo manual, y para evitar la ‘pasteurización’ del diseño, que induce a todos los diseñadores a hacer los mismos objetos por falta de originalidad y audacia. Nuestra a metáfora es el deseo de cambiar el sereno discurrir de lo cotidiano. Nuestros diseños nacen de la calle, del kitsch urbano de los barrios populares y del contacto con la naturaleza”.