Una vez más se anuncian los ganadores de la Bienal de Arquitectura Mexicana, ahora en su edición numero XIV. Entre los proyectos premiados se encuentran Construyendo común-unidad, una propuesta de recuperación del espacio público en una unidad habitacional de la Ciudad de México, diseñado por el Estudio de Arquitectura de Rozana Montiel; la Ampliación del edificio de Rectoría de la Escuela Bancaria y Comercial, anexo a una vieja casa porfiriana de la colonia Juárez de la Ciudad de México, obra del Taller de Arquitectura liderado por Mauricio Rocha y Gabriela Carrillo, quienes también recibieron una medalla de plata por el Edificio de los nuevos Juzgados Orales en Pátzcuaro, Michoacán y una mención por el Foto Museo Cuatro Caminos, en la Ciudad de México; la transformación de una casona catalogada de la colonia Roma, igualmente en la Ciudad de México, en un conjunto de viviendas de nivel alto, por parte de los arquitectos Cadaval y Solà-Morales y la transformación de un edificio en la calle de Milán número 44, por at103 (Julio Amezcua y Francisco Pardo), también recibieron reconocimientos; el edificio de oficinas en Montes Urales 445, de nuevo en la Ciudad de México, proyectado por Colonnier y Asociados, recibió una mención honorífica, mientras el Centro Comercial Oasis, en Coyoacán, Ciudad de México, diseñado por este mismo despacho, recibió una medalla de plata; el Museo Internacional del Barroco, diseñado por la oficina de Toyo Ito en la Ciudad de Puebla, recibió otra medalla de plata, así como el Edificio de viviendas Atrio de Santo Domingo, en Mixcoac, Ciudad de México, diseñado por Vicente Alonso; la Torre BBVA-Bancomer, obra conjunta de los despachos de Legorreta y Rogers, recibió otra medalla de plata y su vecina, la Torre Reforma, diseñada por la oficina de Benjamín Romano, ganó la medalla de oro, el mayor premio que se otorga, sin distinguir categorías, en la Bienal mexicana.