El pabellón de la Santa Sede abandona toda espectacularidad monumental para proponerse, simplemente, como un espacio en obra. Bajo el título Opera Aperta, en alusión al célebre ensayo de Umberto Eco, la intervención no exhibe arquitectura como objeto, sino como proceso en curso, como lugar de reparación, de encuentro y de cuidado. Este pabellón de la Santa Sede se inscribe en el gesto más radical: abrir un espacio, habitarlo con otros y dejar que la arquitectura se construya en comunidad.
mayo 2025