5 enero, 2015
por Arquine
por Salvador Herrera
Discutir movilidad en México este año fue muy frecuente. No es para menos ante el serio problema que enfrentamos como sociedad. Hemos tomado decisiones tan erradas en cuanto a cómo invertimos nuestro dinero público en movilidad que hoy nuestras ciudades funcionan mal o muy mal. Es increíble que todas las ciudades mexicanas sufran de cierto grado de congestión. Desde un tráfico impensable en Valle de Bravo o San Miguel de Allende, un desafortunado Querétaro lleno de autos desde 15 kilómetros antes de la entrada, una Puebla saturada, una Guadalajara plena de vehículos y una Ciudad de México enloquecida por motores.
La movilidad es un asunto de interés público que aún no llega a la prioridad política debida. Muchos políticos creen que les creemos que por subirse a una bicicleta un día y publicar la foto se convierten en promotores de la movilidad sustentable. Sin embargo el lugar común del político mexicano de cualquier nivel en términos de movilidad es la camioneta negra con guaruras adelante, y atrás, si el presupuesto da. Desafortunadamente es común en México el escuchar al mismo político decir, sí a las bicis, y también a los segundos pisos; sí al transporte público y también a los estacionamientos. Esto se ve desde Chihuahua hasta Cancún. En conclusión, los políticos han entrado al tema pero sin mucha información. Confunden honestamente o tergiversan intencionalmente conceptos. La razón, creo yo, es que construir para el automóvil sigue siendo más barato, más rápido, menos conflictivo y sobretodo, más rentable en términos de corrupción.
El 2014 probó esta condición. Avances interesantes y retrocesos notables. Claros oscuros que denotan una falta de consistencia entre discurso e inversión notable. A continuación un breve recuento.
A inicios de año se publicó el Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018 que entre otras estrategias propone generar infraestructura para una movilidad de pasajeros moderna, integral, ágil, segura, sustentable e incluyente. Sobresale que por vez primera la Federación pone atención al transporte público y menciona sistemas de transporte público para Tijuana, la zona oriente de la ZMVM y Mérida así como ampliaciones de los sistemas metro de Guadalajara, Monterrey y la Ciudad de México. Pero a la vez presenta 31 libramientos urbanos en ciudades tan diversas como Cuautla, Puerto Vallarta, Chihuahua o Villahermosa. Sin duda, los libramientos son necesarios en muchos casos siempre han sido factor de expansión urbana dada la ausencia de políticas urbanas complementarias. En algunos casos, como los de Chihuahua y Villahermosa, la mancha urbana y los intereses inmobiliarios ya están presentes en el trazo pactado. Por si fuera poco, la inversión federal en segundos pisos es tristemente alta: Puebla, Cuernavaca y la ZMVM contarán con estas infraestructuras. ¿Esto es movilidad moderna, integral, ágil, segura, sustentable e incluyente como dice el nombre de la estrategia?
Sin duda el Distrito Federal fue el principal escenario de la movilidad en 2014. Este año se unió a Nuevo León y Jalisco en contar con una Ley de Movilidad y dio un paso adelante reconociendo el derecho a la movilidad y estableciendo una jerarquía en los modos de transporte que privilegia al peatón. Por otro lado, el Gobierno de la Ciudad de México suspendió el servicio de pasajeros de la Línea 12 de manera indefinida desde la estación terminal Tláhuac hasta la estación Culhuacán y para el 2015 previó más de 800 MDP en presupuesto para las obras de corrección sin que hasta la fecha tengamos fecha fija para la reapertura ni ninguna penalización aplicada a los funcionarios involucrados salvo su inhabilitación.
Entre los temas de la movilidad chilanga hubo noticias que entusiasman, otras que entristecen, otras que extrañan y unas más que intrigan. Entusiasma la ampliación de los sistemas Ecobibi y Ecoparq. Extraña que la gestión con los vecinos falle. Entristece que este año pereció por accidente el primer usuario de Ecobici, Gerardo Pedroza Castañeda. Entusiasma la inversión en banquetas y espacio público en Mazaryk. Entristece que sea haga tan prominente en una zona de alto ingreso mientras que amplias zonas de la ciudad permanecen en rezago de banquetas. Extraña el encono que ha causado la empresa Uber y extraña más aún la falta de propuesta clara por parte de la autoridad en la materia. Entusiasma la iniciativa de teleféricos en Ecatepec y la Magdalena Contreras. Intriga la forma en la que se vincularan a un sistema integrado de transporte. Entusiasma que la ONU llame al Gobierno del DF a ser asesor en movilidad sustentable. Intriga si están enterados de que este mismo gobierno propone un viaducto elevado por Vasco de Quiroga. Entusiasma el debate del hoy no circula regional porque el descenso en la calidad del aire debe atenderse de manera urgente y coordinada entre las autoridades de la megalópolis. Extraña el proceso de anuncio e implementación.
En el resto del país sucedieron eventos para recordar como avances de la movilidad. Entusiasmó la puesta en operación de la Ecovía en Monterrey pero extraña que la gestión de la operación se tome con menor rigor como ha sucedido en otros sistemas. Entusiasma la ampliación del sistema Optibús en León y su intención de integración con la bicicleta. Entusiasma el programa Mi Bici Pública y la primera Zona 30 de México en Guadalajara, donde los automóviles tendrán como límite de velocidad los 30 kilómetros por hora para proteger a peatones y ciclistas. Entusiasman estas acciones en las distintas ciudades de México pero entristece que se hagan en sus centros mientras sus periferias siguen extendiéndose y disminuyendo la posibilidad de que sus habitantes gocen de una movilidad sustentable.
Para cerrar este breve recuento algunas reflexiones sobre las magnas obras del Gobierno Federal. Intrigan muchas, demasiadas, cosas del tren México Querétaro que van desde lo conocido en torno a la licitación hasta las decisiones de donde hará paradas y en que terrenos se construirán las estaciones; entristece ver el tiradero de árboles en la autopista México-Toluca con motivo de su ampliación e intriga porque ampliar una autopista y al mismo tiempo poner un tren en el mismo trayecto; entristece y quizá hasta enfurece la propuesta del viaducto elevado del tren México-Toluca. Finalmente, sobretodo, intriga la propuesta de conectividad regional al nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Confiemos en que la propuesta de la autopista elevada por el Viaducto Miguel Alemán no suceda.
El nuevo año, al ser año político, será de renovación de Cámara de Diputados, nueve estados cambiarán de gobernador, se elegirá a 903 presidentes municipales y se elegirán 639 diputados locales. Hagamos que la discusión sobre movilidad suba en calidad y compromiso. Propongamos debates, hablemos con los candidatos, y demos seguimiento a sus acciones en este tema. No cabe duda que este país tiene muchos desafíos pero podemos estar seguros que este puede resolverse si como sociedad mexicana entendemos que el tamaño del desafío nos exige atención y cambio.