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¿Qué es la vivienda social?

¿Qué es la vivienda social?

 

Adrián Krezlik | @adi_ponton y Selene Patlán | @selenepatlan

Durante mucho tiempo la vivienda social en México estuvo en manos de los desarrolladores, pero en estos últimos años el Infonavit rescató la idea de una vivienda digna y de calidad para todos con la colaboración de arquitectos nacionales e internacionales. Resultado de una convocatoria abierta, se hizo una selección de los mejores proyectos de vivienda, cuyo resultado fue el Laboratorio de Vivienda: un ejercicio en el cual se construyeron los modelos escala 1:1. Construir prototipos es una buena manera de experimentar los espacios realmente como son, una forma de aprender qué funciona y qué no para generar vivienda de mayor calidad.

Uno de los retos con los cuales se enfrentaron los arquitectos fue diseñar para las diferentes zonas climáticas del país. La arquitectura debería responder y ser consiente del lugar en donde se encuentra. Hoy en día hay que eficientar todos los recursos que tenemos pues cada vez hay menos. El hecho de ser una vivienda social no significa que no tenga que ser de calidad. La calidad esta ligada a los espacios, los materiales y el confort. El uso de blocks de concreto y lámina distingue la vivienda informal, se ha vuelto un estigma en los barrios populares. Otro de los retos de la vivienda social es buscar diseños que quiten estos estigmas.

En la vivienda, la apropiación de los espacios es una parte importante. Las personas tienen que adueñarse de estos lugares para sentirlos suyos . Una vivienda tiene que ser flexible, debería responder a los cambios sociales y etapas de vida de una familia, así como a sus posibilidades económicas.  La mayoría de las viviendas realizadas limitan las posibilidades de crecimiento priorizando una forma e imponiendo una idea de habitar. ¿Cuanto debería costar una vivienda social? ¿Como definir el tamaño de la vivienda social?

Hay algunos casos ejemplares, como el de Rozana Montiel que en colaboración con bambuterra explora el bambú como un sistema constructivo alternativo. Además combina materiales locales y naturales con lámina de polietileno reciclado. Su arquitectura responde al lugar y se mimetiza con la construcción vernácula de Morelos. Cuenta con una planta alta libre bajo un techo que permite el paso del viento,  para dormir fresco en las hamacas.

Taller de arquitectura X explora la vivienda vertical en respuesta al problema de densidad que hay en la Ciudad de México. Propone construir con ladrillo rojo reclamado. La forma de la torre permite la expansión vertical y la planta hexagonal es un manifiesto de formalidad y estética. Permite una planta libre con buena ventilación y hace que no haya muro de colindancia. 

Para una zona boscosa en Michoacán, Dellekamp Arquitectos propone una casa hecha de madera. Cuenta con aislamiento térmico y una techumbre a dos aguas. Desde las vigas hasta las puertas todos los elementos son de madera de pino. A través de un sistema modular basado en  el conocimiento local, esta casa es fácil de construir. Usando un manual cualquiera podría construirla. 

Otra de las casas que responde al clima es la de Rojkind Arquitectos, propone una construcción pasiva y el hecho de enterrar parte de la construcción asegura el confort térmico. La ventilación esta basada en la dirección de los vientos dominantes. 

Frida Escobedo convierte la vivienda en un objeto, elimina los estigmas estéticos de la vivienda social y convierte el habitar en una pieza única, mediante una bóveda de ladrillo rojo que impone la verticalidad del espacio común.

Con el Laboratorio de  Vivienda se empiezan a establecer nuevos estandartes de vivienda social en el siglo XXI, para albergar las necesidades de la sociedad contemporánea.

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