La Bienal de Venecia ha anunciado el nuevo León de Oro a la trayectoria: el arquitecto brasileño Paulo Mendes da Rocha. Un importante reconocimiento que se suma al Premio Pritzker recibido en 2006 y al Pabellón Mies van der Rohe Latinoamericano en 2001.

La decisión fue tomada por el Consejo de Administración de La Biennale, presidido por Paolo Baratta, y contó con la recomendación de Alejandro Aravena, Curador de la 15ª Exposición Internacional de Arquitectura. La bienal destacó, entre otros puntos, la atemporalidad de su arquitectura: “Muchas décadas después de su construcción, cada uno de sus proyectos han resistido la prueba del tiempo, tanto estilística como físicamente. Esta asombrosa consistencia puede ser la consecuencia de su integridad ideológica y su genio estructural”.

“Es rival del conformismo y, al mismo tiempo, realista y apasionado. Sus campos de interés van más allá de la arquitectura, abarcando aspectos políticos, sociales, geográficos, históricos y técnicos. El papel que desempeñó para muchas generaciones de arquitectos en Brasil, América Latina y en muchas otras partes del mundo es la de una persona capaz de unirse a los esfuerzos compartidos y colectivos, alguien capaz de atraer a otros a la causa de generar un mejor entorno construido”.