En un tranquilo bloque de L Street, entre las calles Veintitrés y Veinticuatro, West End 37 da forma a una esquina de la ciudad. La fachada escalonada del edificio se genera por las condiciones únicas del sitio, que desafían los límites de las regulaciones de zonificación prescritas y dan como resultado un espacio urbano dinámico.
Representante de una tipología inusual dentro de Washington DC, las secciones del edificio sobresalen y tienen presencia, incluso desde una distancia –al oeste, por L Street, desde Washington Circle, desde puntos al norte, en la calle Veintitrés–; otras secciones son intercaladas para respetar las opiniones de los vecinos y para minimizar el impacto de la mayor parte del bloque residencial sobre los edificios de menor altura circundantes. A medida que uno se acerca al bloque, el movimiento uniforme de la fachada se vuelve claro, individualizando y expresando cada unidad residencial.
Dentro del edificio, varios espacios son accesibles para el público y los residentes. La planta baja del edificio alberga una nueva sucursal de la Biblioteca pública, un café y diversos espacios comerciales que dan vida a la calle como espacio público.