La Casa de la Familia Abrahámica es un conjunto de tres espacios religiosos: una mezquita, una iglesia y una sinagoga, que se asentarán sobre un cuarto espacio laico formado por un foro y un jardín elevado. La casa servirá de comunidad para el diálogo y el intercambio interreligioso, fomentando los valores de la coexistencia pacífica y la aceptación entre distintas creencias, nacionalidades y culturas. En cada una de las casas de culto, los visitantes podrán observar servicios religiosos, escuchar las sagradas escrituras y experimentar rituales sagrados.
La forma se traduce de los tres credos, en contraposición a lo que es diferente. A través del poder de estas revelaciones, el diseño emerge como poderosas formas plutónicas con una geometría clara: tres cubos asentados sobre un zócalo. La narrativa de cada religión se despliega a través de varias escalas -desde la estructura hasta el detalle- y emerge a través de los elementos de la creación: el agua y la luz. Cada cámara se encuentra dentro de un patio con fuentes triangulares diseñadas para refrescar el cuerpo. Al entrar en cada lugar de culto, la luz baña a los visitantes mientras el aire caliente es arrastrado desde el perímetro hacia los techos adornados, templando el interior. Envueltas en concreto blanquecino que desvía el calor del sol y hace referencia a la arena y las montañas de los Emiratos, cada forma se orienta hacia referencias religiosas al tiempo que se asienta dentro de un jardín unificador.
La mezquita Imam Al-Tayeb está orientada hacia La Meca. La luz se filtra a través de las delicadas celosías de las pantallas mashrabiya, que hacen circular el aire al tiempo que mantienen la intimidad. Cuatro columnas monolíticas sin juntas representan las nociones islámicas de estabilidad, orden y plenitud, y crean un espacio abovedado que orienta a los visitantes hacia el mihrab. La única pared totalmente opaca se ondula para dejar sitio al sencillo mihrab de piedra, bañado por la luz estampada de las pantallas. A lo largo de dos esquinas del patio hay espacios para las abluciones, protegidos por puertas de bronce que recuerdan formalmente los siete arcos que dividen cada fachada del exterior. Mediando entre los elementos y la intimidad, una cúpula invertida y un techo piramidal dentro de una forma cuadrada significan la ablución femenina y masculina.
La iglesia de Su Santidad Francisco está orientada hacia el sol naciente en el Este, junto con un bosque de columnas que compone la forma para permitir la entrada de luz desde el exterior. Desde el patio, dos columnas desiguales suspendidas sobre la entrada simbolizan la prueba de la fe. Un cálido portal de madera nos guía hasta el espacio de la congregación, donde los bancos de roble diseñados por Adjaye Associates miran hacia el altar. Inspirado en el altar de la Basílica de San Pedro, un dosel de elementos lineales de madera cae en cascada desde el techo en una “lluvia de redención extática”. El altar, el ambón y el tabernáculo de mármol, así como una credencia de roble y tres sillas, se asientan en el santuario bajo el crucifijo, una forma humanoide sin indicación de raza o credo. Junto a la iglesia se encuentra un baptisterio, denotado por una forma cónica que emerge por encima de los muros del patio con pequeñas ventanas dispersas de las que emana luz para el interior. En el interior, una sala octogonal alberga una pila bautismal, que emerge del suelo en forma de mármol toscamente tallado.