Casa Martha es el hogar de una arqueóloga, por lo que se diseño con técnicas rudimentales y artesanales, concebida con la finalidad de unificar el tiempo, forma y contexto mediante su composición y materialidad de origen ancestral. Ubicada entre el municipio de Ensenada y de Rosarito, en la zona de La Misión, donde el paisaje urbano se densifica con tipologías arquitectónicas destinadas al turismo. El lote cuenta con dimensiones de 15 x 40 metros, en un terreno de topografía accidentada.
El programa arquitectónico contemplaba la casa de retiro para una pareja, Martha y Bill, así como un espacio para las artes plásticas. Se planteó un desarrollo simple, que se mimetizará con el sitio y con una intervención mínima. Un diálogo entre tres volúmenes incrustados en el sitio y orientados hacia el océano pacífico a partir de un eje claro.
El primer nivel se divide en dos áreas, la zona para visitas conformada por dos habitaciones y el área de estudio que puede funcionar como un taller de pintura y de carpintería o bien como garaje. En el segundo nivel, se encuentra el núcleo de la casa: la sala de entretenimiento, comedor y cocina conforman el umbral de acceso con amplios ventanales y pórticos tejidos con pino salado. Esta celosía genera, a su vez, una protección de los vientos dominantes, así como un componente de privacidad hacia el interior generando un juego de luz y sombras. Al fondo del área social se desarrolla una escalinata que conduce al tercer nivel donde se encuentra la recamara principal que cuenta con vista al paisaje del contexto, en este espacio se difumina el interior con el exterior.
Casa Martha surge y se modela con profunda sensibilidad y respeto de su entorno. El principal elemento constructivo es la tierra compactada, de esta forma el sitio y su topografía se consolidan como las materias primas del proyecto.