La tienda de Apple, en el nuevo Zorlu Center de Estambul, fue completada en 2014 como la primera de una serie de tiendas nuevas en todo el mundo. Una estrecha colaboración entre arquitecto y cliente que luego traería nuevos frutos después de la reciente inauguración del Apple Park en California. El resultado hace que la tienda sea una expresión de la marca y un faro para el desarrollo de la zona, donde la arquitectura complementa la pureza de la forma, la innovación y la facilidad de uso de los productos en exhibición.

La tienda tiene como remate una espectacular linterna de cristal iluminada que se refleja en el espejo de agua. Se describe como un pozo de luz que la distribuye a través de él a los niveles subterráneos.

El proyecto presenta una composición engañosamente simple, pero técnicamente avanzada: cuatro paneles rectangulares de vidrio, cada uno de 10 metros de longitud, sujetos sin juntas visibles y cubiertos por una lámina ligera de fibra de carbono opaco.

Bajo el nivel de rasante, la tienda se organiza en dos niveles y cuenta con mesas de madera de la firma de Apple, un Genius Bar con paredes de acero inoxidable, elementos que se han adoptado como el estándar para todos los espacios comerciales de la empresa.

Los pisos están conectados por un par de escaleras de vidrio, que se colocan debajo de dos tragaluces y se apoyan en paredes de cristal. La luz del día se extiende por la tienda tanto a través de las escaleras como la fachada del almacén y se refleja por las superficies de acero inoxidable. La fachada está construida con paneles de vidrio monolítico de 9 m de altura y, al igual que la linterna, no tiene soportes estructurales.