Un proyecto que aparece impreso en la Revista Arquine 109 – Reparaciones
La torre número 3 de la Rue des Anjoncs, parte del barrio de La Chesnaie (Saint-Nazaire, comuna de la región de los Países del Loira), es símbolo del urbanismo de la década de 1960 y se enmarca en un proyecto de renovación urbana. Lamentablemente, 4 torres (cada una con 60 viviendas de interés social), fueron demolidas antes de iniciarse este proyecto. En este contexto, la propuesta de transformación de la torre de 10 plantas propone un cambio de estrategia: en lugar de la demolición, el proyecto plantea la posibilidad de reutilizar, transformar y densificar a partir de las cualidades y el potencial existentes.
La transformación se llevó a cabo desde el interior con el objetivo de mejorar el espacio de cada vivienda. Por ejemplo: los cuartos de baño, de 3 m2, se trasladaron a una habitación de 9 m2 con ventana; a su vez, se construyó una nueva habitación con una estructura metálica ligera e independiente, así como un jardín de invierno de 2 m de ancho añadido a la fachada; también un balcón de 1 metro, que une la nueva habitación con la sala de estar. En paralelo, se construyeron 40 nuevas viviendas sobre el área de estacionamiento en la base de la torre, que se encontraba en desuso y situado. De esta manera, se creó un nuevo edificio con 80 viviendas de gran calidad.
El proyecto demostró que transformar, ampliar y densificar es mucho más sostenible y menos costoso que la demolición de 40 viviendas existentes y la construcción de 80 viviendas nuevas. El resultado fueron pisos mucho más amplios que el estándar actual de construcción. El proyecto prefiguró así la transformación total del barrio. El principio de densificación, llevado a cabo en otros edificios del barrio, permitiría la construcción de 258 viviendas nuevas, la transformación en términos de calidad de 312 viviendas existentes y la creación de nuevos equipamientos y servicios del barrio. El resultado fue una intervención sobre una superficie total de 10,282 m2, de los cuales 3,275 m2 correspondieron a lo que ya existía y 1,654 m2 a las extensiones, además de 4,912 m2 correspondientes a departamentos nuevos (incluidos jardines). Todo ello sin disminuir la superficie del gran parque central.