Esta vivienda unifamiliar, situada en Route de Frontenex, forma parte de un espacio preservado del tejido urbano histórico. Construida en 1868, consta de tres plantas residenciales sobre una planta baja en semisótano, destinada a uso industrial. Además, se añaden dos anexos dispuestos en ángulo recto con la casa, los cuales forman un patio y un jardín en la parte trasera.

En 2014, se lanzó un concurso para la instalación de una guardería. Esta convocatoria no debía afectar a los pisos superiores del edificio principal, que actualmente son superiores actualmente residenciales del edificio principal. El proyecto elegido se adapta a las estructuras existentes del edificio, protegido por su carácter patrimonial. Por lo tanto, no se ve ningún rastro de ninguna intervención contemporánea en el exterior. La creación de una entrada única desde el patio a la guardería, con su zona de distribución central, es uno de los principios rectores del proyecto. En el interior, se ha prestado especial atención a mejorar las conexiones intersectoriales, optimizar el espacio de la cubierta abovedada y poco iluminada y reforzar los vínculos con el jardín.

En cuanto a la organización programática, la distribución de los diferentes grupos de edad y la calidad de los espacios infantiles son aspectos clave de este proyecto.Los niños pueden distribuirse a lo largo de dos volúmenes. La zona de los más pequeños se irradia alrededor de un núcleo central en el lado del parque del primer piso, con acceso directo al jardín protegido lejos de la Ruta de Frontenex. Los niños mayores, más móviles, que salen en viajes regulares, permanecen en contacto con el espacio del patio más urbano.

El espacio abovedado de la planta baja se utiliza como área de bienvenida y comedor para los niños, y tiene grandes ventanales que dan al patio. Se ha creado una espaciosa sala de juegos en lo alto bajo el techo abovedado, definiendo  un nuevo papel para este magnífico espacio.