La Casa Hara está ubicada en una aldea agrícola en la ciudad de Nagaoka, prefectura de Niigata.
La mayoría de las funciones que se requieren en una casa totalmente autosuficiente ya estaban presentes en el sitio, como la casa de los padres, áreas de almacenamiento y habitaciones privadas.
La dirección del diseño fue crear un edificio que revitalice las estructuras ya presentes en el sitio, y que tenga el potencial de adaptarse a nuevas funciones a medida que surja la necesidad o el estado de ánimo.
El edificio emula su entorno, compuesto por muchos invernaderos de vinilo y cobertizos de trabajo, y utiliza ensambles de madera cuadrados de 120 mm para crear una serie simple de cerchas en forma de “A”. Esa estructura crea la imagen de una gran carpa; una estructura rígida pero generosa que asimila todos los comportamientos humanos. El almacenamiento, las particiones y las habitaciones privadas se han eliminado en la medida de lo posible para simular un gran espacio abierto que se adapta a las necesidades del usuario. En ese entorno, uno no puede evitar depender del apoyo de los otros edificios que lo rodean, sobresaliendo así de la envolvente del edificio y promoviendo el uso de la arquitectura existente. El objetivo era crear una forma de vida que nunca esté completa dentro de esta única estructura sino que, más bien, forme una pieza de la arquitectura más grande: una casa que forma parte de un grupo de edificios.
Por lo tanto, la Casa Hara, como una simple “serie de marcos de celosía”, tiene como objetivo conectar todas estas entidades al ser parte de la forma colectiva del pueblo. Refuerza las viejas conexiones mientras otras nuevas con los edificios circundantes y la comunidad.
Casa Hara es una propuesta de una “casa pequeña” que muestra un nuevo “sistema de gestión de una aldea”; una forma de revitalizar pueblos que antes eran un conjunto de fuertes interconexiones.