por Diana Ortiz | @rojoalizarina + Erik Herrera | @erik_heit

Las ciudades y los edificios van transformando sus usos a través del tiempo. Las naves industriales construidas a finales del siglo 19 y principios del 20 dejaron de producir bienes para dejar paso a fábricas de cultura. Puesto en marcha en el año 2007 y dirigido por el Instituto de Cultura de Barcelona, Fábricas de Creación ha habilitado antiguos recintos fabriles en distintos puntos de la ciudad. Espacios como la Illa Philips, La Seca, La Escocesa, La Central del Circ, el Ateneu Popular 9 Barris, Hangar y la recientemente remodelada Fabra i Coats, suman aproximadamente 30 mil metros cuadrados.

Luego de una reforma que duró dos años, el pasado sábado 29 de septiembre se inauguró un espacio de 4 mil 713 m2 que se destinará a conciertos, instalaciones y proyecciones a través de dos programas, que son el Centre d’Art Contemporani y la Fábrica de Creación. Con ello se consigue crear no sólo un polo de exhibición cultural si no también un espacio de creación. La reutilización de la antigua fábrica textil Fabra i Coats -proyectada por Francesc Bacardit (BAMMP) y Manuel Ruisanchez– propone espacios para la cultura que se caractericen por la transversalidad y la polivalencia, sumando funciones, usuarios y disciplinas diversas como las artes escénicas, la música, las artes plásticas, visuales, audiovisuales y las nuevas tecnologías.

La intervención destaca el respeto al edificio contenedor, el cual ha sido conservado en su totalidad poniendo de manifiesto la capacidad de las naves industriales para absorber cualquier tipo de programa, y en el que únicamente se han ejecutado cubículos/boxes encargados de albergar los espacios de ensayo. Una nueva cubierta en uno de los cuerpos más bajos permitirá la entrada cenital de luz en uno de los espacios destinados previsiblemente a la creación escénica y nuevos núcleos de  conexión y distribución. La transformación arquitectónica habilita un sistema de cerramientos móviles que permitirá configurar el espacio según la multidisciplinaridad de eventos. Al mismo tiempo refuerza la existente red de fábricas y su relación con centros similares en otras ciudades.