Reconocer la necesidad es la primera condición para el diseño

Charles Eames

El acto de curiosidad podría a la larga convertirse en un vicio que lleva a alguien a inquirir lo que no debiera importarle, pero en este caso, el acto de “lo curioso” desembocó en un fenómeno que no sólo marcó la historia del arte, la arquitectura, el diseño, las ciencias visuales o de comunicación. Charles Eames (1907-1978)  junto con Ray Eames desembocaron su curiosidad y sus inquietudes creando un mundo único para su época. Era el Estados Unidos de la 2da. Guerra Mundial que no sólo sufría cambios por la pasada recesión de los años 20 sino que también creaba en la sociedad reacciones ante estos hechos. Los Eames fueron un claro ejemplo de estos cambios en las artes, el diseño y la arquitectura de la pos guerra que revolucionó la vida cotidiana de una población que renacía a través de diversos lenguajes y la manipulación de las ideas.

La conjunción de dos formas diferentes de ver el mundo creó una reacción química que se volvió irreversible en la percepción del diseño y la arquitectura, cada objeto que esta pareja diseñaba era una extensión de su propia arquitectura. Ellos funcionaban a través de imágenes para contar historias, el cine y la fotografía fueron una extensión de su mundo comunicando de otra forma sus lenguajes para manipular las ideas. Andy Warhol solía decir que la vida era una serie de imágenes que cambiaban a medida que se repetían, imágenes hechas lenguaje, lenguaje hecho diseño y diseño hecho vida. Vidas que a lo largo de toda una época del auge de lo moderno, de sus lenguajes y sus personajes sobresalieron por si solas, estos fueron los mundos de Charles y Ray: Los Eames.