La Casa Paraíso tiene una sola planta que se abre hacia la calle y hacia un campo de golf. Sin bardas ni muros medianeros, la naturaleza circundante se introduce en el interior. La propuesta se organiza a partir de una serie de muros y trabes que, orientados en dirección a las vistas, delimitan los diferentes espacios y necesidades, mientras que la cubierta a dos aguas contiene y ordena el proyecto.
julio 2017