Espacio político: rave y cuerpo
Música y política convergen en las antípodas, y quizás han creado, no un movimiento, pero sí una cultura en la [...]
24 octubre, 2014
por Carlos Lanuza | Twitter: carlos_lanuza_
En la historia de la humanidad, orden y caos parecen ser los extremos de una misma línea, una línea que viene a ser un discurso establecido en torno a una concepción de la sociedad. Cuando no hay referencias que nos guíen en la conformación de una sociedad compacta y acompasada se suele decir que vivimos en caos, y pasa lo contrario cuando todos procuramos una misma manera de pensar. En general, el arte tuvo como objetivo en algún momento la búsqueda del orden en una sociedad caótica, y la arquitectura también la tuvo. Encontramos sus reflejos y aspiraciones a lo largo de la historia y parece que el discurso se repite constantemente, orden y caos, uno de los temas universales.
A partir de la finalización de la Segunda Guerra Mundial, se vivió en la sociedad estadounidense una sistematización y regularización de una manera de vivir que tuvo un fuerte impacto en la arquitectura, hubo un acompasamiento de la sociedad. Un caso muy representativo de esto es el “sueño americano” que se vio traducido de alguna manera en proyectos residenciales. Uno de sus grandes exponentes fue el proyecto iniciado en Los Angeles por la revista Arts & Architecture en 1945 con sus Case Studies Houses.
Son 36 proyectos residenciales que nacieron, a partir de la iniciativa de esta revista, para proporcionar modelos de viviendas de bajo costo, prefabricadas, prototípicas y experimentales para la familia estadounidense típica de su época. Quizá es en sus condicionantes donde se condensa una gran sincronía del espíritu de la época: casas prefabricadas, instrumentos para vivir que se podían ubicar en cualquier parte, no tenían una localización específica y respondían a un modo de vivir más abstracto al no tener un sol y un suelo que los condicionara, su contexto era el mundo; familia típica, con un núcleo compacto de pocos miembros, que se regía por un pensamiento romántico del amor entre los progenitores que siempre perduraría y la certeza de que sus hijos tendrían una eventual independencia gracias a un sistema que funcionaba, y en el cual estaba depositada toda su confianza.
La sociedad iba a un mismo compás, y este compás iba acompañado de un aparataje artístico que la definió y nos define hoy en día. Las Case Study Houses representan un sistema envolvente que encarna la vida y todas sus manifestaciones. Lo vemos en las fotos de Julius Shulman, retratando no sólo ésta, sino toda la arquitectura de su época y ayudando a definirla a través de la manera cómo enmarcaba –aún cuando fuese necesario cargar con plantas que no se encontraban en el sitio para mejorar la foto, “falseándola”-, representando al ama de casa feliz, que flexiona una pierna mientras corta un tomate en una cocina totalmente aséptica, y coches y trenes de juguete en primer plano con los que juega un niño en la terraza bajo la mirada protectora de sus padres.
Esto es una gran parte de la imagen que proyectó Estados Unidos, y es lo que de alguna manera se logra entrever en Visual Acoustics, el documental sobre la obra de Shulman. Sin duda alguna la costa oeste estadounidense ha tenido mucha influencia en el desarrollo de la arquitectura moderna. La estética desarrollada no sólo por arquitectos, sino también por fotógrafos, editores y diseñadores se encuentra aún vigente entre nosotros, siendo muchos de ellos quienes nos proporcionaron una nueva manera de ver el mundo. Por ejemplo son imprescindibles los trabajos de Charles y Ray Eames para poder entender nuestro día a día; abarcaron todas las escalas –nunca mejor dicho tras presentar su famoso Powers of ten para IBM-, desde el cine y la publicidad, hasta el diseño industrial y la arquitectura.
El papel que jugó John Entenza fue sumamente importante para la difusión de todo un movimiento cultural y artístico de esta parte del mundo. Supo mostrar el orden que yacía en la base de esa sociedad a través de las obras de Raphael Soriano, Craig Ellwood, Pierre Koening y Richard Neutra entre muchos otros. Como editor de Arts & Architecture entendió los futuros problemas a los que se enfrentaría su país y reunió a los grandes talentos para, a través de su plataforma, exponer un nuevo pensamiento que definió la manera de vivir y ver la arquitectura.
Música y política convergen en las antípodas, y quizás han creado, no un movimiento, pero sí una cultura en la [...]
Las superislas, el proyecto urbano que busca recuperar algo del espacio que a lo largo del siglo pasado fue tomado [...]