A partir de su esencia, se pensó en dos espacios diferentes de la Ciudad de México para ponerlas a prueba: uno público, en el Centro Histórico y otro cultural y creativo, en la Colonia Doctores. Durante los días del Festival, la ciudadanía pudo disfrutar de una forma distinta de vivir la plaza Manuel Tolsa, sentados en las bancas que se repartieron por toda la explanada, ofreciendo nuevas maneras de ver los edificios que la rodean como el Museo Nacional de Arte o el Palacio de Minería o el Palacio Postal.

En Laguna en cambio, la intervención de Rokam es menos fugaz. Por un lado, la pieza del tercer piso, en el umbral entre las escaleras y la azotea, en la que se intervino todo el espacio, un envolvente verde con frondosas plantas y en el centro una banca, también verde, iluminada como una obra de arte por si misma. A parte, otras cinco bancas, donadas para quedarse permanentemente, se ubicaron en los diferentes espacios de la antigua fábrica, incluyendo las banquetas de acceso, para formar parte del día a día de Laguna y los peatones de la Colonia Doctores.

El cargo Arisa de Rokam apareció primero en Arquine.

En una entrevista reciente, la historiadora Susana Sosenski señalaba una carencia en el diseño urbano para las infancias. Decía: ” ¿Por qué hemos construido una sociedad que no les enseña a estar en el espacio público y donde no defendemos que los niños tienen derecho a usarlo? Ni siquiera les damos el derecho a decidir cómo les gustaría que fuera un parque. Es posible que urbanistas y arquitectos inviten a las infancias para consultarles cómo les gustaría que fuera. Se diseñan casi todos iguales. En México, por ejemplo, predomina el plástico.”

Hoy en día, la visión del adulto dirige agendas públicas que inciden en cómo se diseñan los espacios públicos. Esto materializa un entorno urbano hostil donde predomina una injusticia socio-espacial que invisibiliza a la población infantil, casi siempre en nombre de lo que otros piensan que es la propia seguridad de este sector. Las interacciones de varias generaciones con el espacio público y la ciudad casi siempre son negativas.¹

Considerar la importancia del juego y la perspectiva infantil en la creación de las ciudades es una responsabilidad que debe compartirse entre diversos actores y disciplinas. Se trata de hacer espacios que también construyan comunidades: escenarios para el encuentro que sean plataformas para ejercer y exigir derechos. También, se debe buscar que el diseño explote oportunidades para implementar metodologías que implementen las participación infantil en la proyección de los espacios que ocuparán las infancias.

Paisajes de juego es un podcast que aborda estos temas. Desarrollado entre Coolhuntermx y MACIA Estudio, esta serie plantea las siguientes preguntas: ¿qué lugar se les ha dado a las infancias en la esfera pública y urbana? ¿Cómo es una ciudad amigable para las niñas y los niños? ¿Qué tiene que ver el juego con la planificación de ciudades y con el diseño industrial y arquitectónico? Todo esto se discute mediante los siguientes ejes: ciudad, medio ambiente, género y aprendizaje.

¹ A partir de este párrafo, se parafrasea la descripción del proyecto publicada en el sitio de MACIA Estudio y Coolhuntermx.

El cargo La ciudad lúdica apareció primero en Arquine.